La Universidad del Valle anuncia la entrega de Casa de Paso para Estudiantes Víctimas del Conflicto Armado.
En la más reciente sesión del Consejo Superior de la Universidad del Valle, celebrada el pasado 31 de mayo, se anunció la entrega de una Casa de Paso para Estudiantes Víctimas del Conflicto Armado por parte del Gobierno Nacional.
Este importante paso para la protección de las víctimas, es el resultado de un esfuerzo conjunto entre la Comunidad de Estudiantes Víctimas por la Paz de la Universidad del Valle -CEVP-UV, el Consejo Superior con su representación estudiantil, Colombia Joven y la Sociedad de Activos Especiales -SAE.
“Esta es una iniciativa de Gabriela Posso, egresada de la Universidad del Valle y actual Consejera Presidencial para la Juventud. Con ella y los estudiantes víctimas del conflicto hemos conversado para que haya un espacio amplio, cerca a la Ciudadela Universitaria de Meléndez, que funcione como casa de paso para los estudiantes que son víctimas del conflicto provenientes del Pacífico y del suroccidente colombiano”, manifestó el rector Edgar Varela Barrios.
“Esperamos poder concretar la solicitud que he firmado ante el Consejo Superior, con presencia de la consejera Gabriela Posso. Esperamos que próximamente podamos esta casa, una infraestructura ya construida que hace parte de los bienes que la SAE tiene decomisados al narcotráfico; se puede tramitar su donación para que hagamos una administración colegiada como hacemos con la casa de paso indígena, un proyecto en el que somos referente”, agregó el directivo universitario.
La coordinadora de la CEVP-UV Manuela Bedoya Jaramillo, estudiante de Historia y víctima del conflicto armado, expresó su emoción y destacó la importancia de esta iniciativa para garantizar el acceso a la educación superior de las víctimas del conflicto armado en Colombia.
“Como Comunidad de Estudiantes Víctimas por la Paz, venimos cobijando no solamente a la población organizada dentro de nuestro colectivo, sino a la población en general que tiene la condición de víctima y son estudiantes de la Universidad del Valle. Somos 30 personas organizadas, pero la Universidad del Valle tiene 1729 estudiantes que ingresaron bajo el cupo por excepción de víctimas a los que la comunidad busca acoger”, expresó Manuela Bedoya.
La Comunidad de Estudiantes Víctimas por la Paz está integrada por estudiantes censados en el Registro Único de Víctimas (RUC), así como por aquellos que, aunque no han declarado oficialmente su condición, han sido desplazados de sus territorios a causa del conflicto armado.
En esa perspectiva, el coordinador de la Comisión Étnica Popular del Nivel Colectivo de la CEVP-UV Fernando Palomino destacó la casa como una oportunidad para trabajar por las víctimas, especialmente por las poblaciones golpeadas por el conflicto con un componente étnico. “La población afro de estos territorios hoy deben de cantar victoria junto a nosotros porque se materializa un sueño no solo del colectivo, sino de toda la población víctima que hoy quiere ingresar a educación superior. Desde el colectivo y desde la Universidad cuentan con una representación que vela porque tengan las garantías para ingresar a la educación superior”.
Cali es uno de los principales destinos para la población víctima del conflicto armado en el país. Con aproximadamente 244 mil víctimas, Cali se ha convertido en un espacio de acogida y oportunidades educativas para aquellos que buscan comenzar sus estudios universitarios.
Se espera que la entrega oficial de la Casa de Paso se lleve a cabo en aproximadamente un mes y medio, de acuerdo a lo establecido en el Consejo Superior de la Universidad. Durante este periodo, se trabajará en la definición de los detalles administrativos y operativos de la casa, en colaboración con la Vicerrectoría de Bienestar Universitario, encargada de velar por el bienestar de los estudiantes, así como con organizaciones de víctimas.
La Casa de Paso para Estudiantes Víctimas del Conflicto Armado representa un salto sustancial en el camino hacia la equidad y la inclusión en la educación superior. Esta casa, esperada con gran anhelo, eliminará una de las mayores barreras de permanencia para los jóvenes de áreas afectadas por el conflicto al brindar un espacio seguro y adecuado para que puedan completar sus estudios universitarios.