La directora del Instituto Cisalva de la Universidad del Valle, María Isabel Gutiérrez Martínez, finalizó su visita a China, en la que realizó la evaluación técnica de tres comunidades que buscan ser miembros de la Red Internacional de Comunidades Seguras.
La investigadora María Isabel Guitérrez conoció los programas que se implementan en las localidades de Jincheng, Jingweiyuan y en la ciudad de Chengdu.
Esta visita hace parte del proceso de certificación, que se inicia luego de la manifestación de interés de ser parte del Movimiento Internacional de Comunidades Seguras, que promueve desde hace 30 años el Instituto Karolinska de Suecia, y del cual Cisalva es una de las certificadoras autorizadas.
Las comunidades chinas se destacaron por ser lugares en los que se abordan las lesiones de manera preventiva y controlada, lo que le permite a estas comunidades asiáticas posicionarse en el mundo como casos evidentes de colectividades planificadas basadas en un enfoque de seguridad integral.
Jingweiyuan Petrochina Changqing Oilfield es una comunidad integrada por familias, donde uno de sus miembros trabaja en esta compañía de petróleo, una de las más grandes del país, donde se destacan programas para ancianos y niños (alejados de sus padres o left-behind) en espacios de cuidado, estimulación y educación durante las 24 horas del día, con el propósito de brindarles acompañamiento de bienestar y apoyo sicológico y evitar el mal uso del tiempo durante la ausencia de los padres que trabajan en una zona muy alejada.
La segunda comunidad que estuvo en proceso de revisión fue Jincheng Coal Mining Group, en donde viven familias de personas que trabajan en una mina de carbón y en donde se implementan avanzados programas en seguridad laboral a través de tecnología de punta e innovadoras reglas en salud ocupacional, que contribuyen a la prevención de lesiones a causa del trabajo que desempeñan en el proceso de explotación de la mina de carbón.
Por último, se realizó una visita al Distrito de Jinjiang, dentro de la ciudad de Chengdu, la tercera ciudad más grande de China, en donde se aborda la seguridad desde un enfoque más integral, implementando programas de salud, educación, prevención del crimen, promoción de convivencia, conformación de grupos de apoyo para la prevención de suicidio, y en donde se destacan el diseño y la construcción de espacios innovadores que promueven actividades para solidarizarse con las personas en situación de discapacidad visual, transmitiendo las mismas sensaciones que ellos perciben del mundo pero en un ambiente completamente oscuro con la ayuda de un bastón y de una voz guía.
Durante el recorrido de esta localidad se destaca el trabajo voluntario en programas de pedagogía social, en los que se promueve el reconocimiento y el respeto en el otro para convivir en comunidad.
Se espera que en los próximos meses puedan certificarse estas tres comunidades y que sean parte de las más de 347 comunidades seguras que actualmente existen en el mundo.
China Occupational Safety and Health Association es la organización local que lidera la promoción de Comunidades Seguras en China y ejerce un papel fundamental en el acompañamiento de cada comunidad para la planeación y el logro de sus objetivos, que son presentados a través del Formato de Aplicación y posteriormente en la Visita de Sitio.