Lynda Osorio le apuesta a romper paradigmas sobre la imagen personal y corporativa.

En el mundo de los empaques, Lynda Osorio ejerció su carrera profesional como diseñadora industrial, graduada de la Universidad del Valle. Su imagen y la manera en la que establecía relaciones le abrieron incontables puertas. Con el tiempo, decidió poner atención a eso que la hacía marcar la diferencia.

Así, aterrizó en los Estados Unidos, donde se convirtió en Consultora de Imagen Personal y Personal Shopper certificada en Miami. “Me la pasaba visitando gente y me di cuenta de que mi imagen me ayudaba. Si sabes comunicarte, te va bien. Eso me llevó a hacer lo que ahora hago, que está muy relacionado con el mundo empresarial del cual vengo”, explicó Osorio.

La caleña encontró una oportunidad de mercado como consultora de imagen y personal shopper, pero decidió darle un enfoque diferente dedicándose al ámbito empresarial y también ayuda a las personas a “proyectar la mejor versión de sí mismas”.

“He descubierto que las empresas que tienen cierto grado de madurez y están preparadas para invertir en el desarrollo de sus empleados, son las que ven esto como estrategia para mejorar la reputación y el desempeño”, comentó Osorio.

Para ella, los empleados se convierten en un punto de contacto de la marca con los clientes y deben entender que son el reflejo de la empresa, para generar credibilidad, a través de la comunicación, la apariencia y el comportamiento.

La propuesta de Osorio involucra el ámbito corporativo. Su metodología implica hacer un diagnóstico, para proponer un plan de trabajo por módulos, en los que se realizan talleres, según las falencias identificadas, “por ejemplo, algunas empresas necesitan trabajar en el servicio al cliente, entonces se les prepara un taller para eso y se hace cuando la empresa lo desee, a su ritmo”, explicó.

La imagen personal

“Todo el tiempo nos estamos vendiendo. Hay personas naturales que entienden que si mejoran su imagen van a tener unas ventajas competitivas en el mercado laboral”, dijo Osorio, quien también trabaja con personas del común.

Según la consultora de imagen, “luego del diagnóstico, se hacen intervenciones, que no tienen nada que ver con cirugías estéticas. Muchas consultoras mandan al quirófano, yo no. La idea es aceptarse y quererse. Si alguien tiene problemas de autoestima o nutrición hay que trabajar en ello, sacar la mejor versión de cada persona y no tenés que dejar de ser vos”.

Bajo esa convicción, Osorio, quien también es MBA Magíster en Administración de Empresas con énfasis en Mercadeo de la Pontificia Universidad Javeriana de Cali, tiene en cuenta los talleres de protocolo, auditorías de armario, maquillaje, estilo de comunicación, el análisis morfológico, de color, nutrición, entre otros, que se hacen cuando la persona pueda. Además, maneja temas como la imagen digital, marca personal y personal shopper.

Dentro de los paradigmas que Lynda Osorio quiere romper, están: que la imagen no es algo solo para famosos, pues debe interesar a cada individuo y se puede acceder a estos servicios fácilmente; que no es solo para mujeres y no hay que viajar a otros lugares, pues se trabaja en ello en Cali y que hay que abordarla desde la autoaceptación porque “si no te aceptas, no puedes brillar”.

Tips para hombres ejecutivos

Accesorios: Usar una pluma ejecutiva, un tarjetero y portafolio en vez de mochila; combinar el reloj según vestimenta.

Zapatos: Usar zapato de agujeta cuando porte traje con corbata y mocasines en código de negocios casual.

Presentación: Acudir a la peluquería cada 3 semanas, las uñas deben estar cortas y si usa barba manténgala pulcra.

Tips para mujeres ejecutivas

Accesorios: No deben ser más de 3 y se eligen según el rostro, la estatura y la ocasión. Usar bolso de colores neutros.

Zapatos: Los cerrados y de tacón proyectan autoridad. No usar zapatos planos en el ámbito profesional.

Presentación: En las uñas, evite adornos infantiles y colores chillones. Usar fragancias suaves y sofisticadas.

Tomado del Periódico El Tiempo